Fecha de publicación: 07/06/2011

Aprobado el primer Plan de Actuación del Gobierno Vasco contra la Violencia de Género

Articulado sobre tres campos de actuación que se centran en la atención a las víctimas, la coordinación entre los servicios de atención y la sensibilización ciudadana

El Consejo de Gobierno ha aprobado en su reunión de hoy el primer Plan de Actuación del Gobierno Vasco contra la Violencia de Género. Un documento en el que se recogen las líneas de actuación y acciones que se llevarán a cabo durante los próximos dos años, de acuerdo con las directrices para la IX Legislatura recogidas en el V Plan para la Igualdad entre Mujeres y Hombres en la CAPV.

El Plan aprobado hoy por el Ejecutivo vasco se estructura en torno a los tres ejes de actuación de la Dirección de Atención a las Víctimas de la Violencia de Género y se incluyen en él las acciones que los distintos Departamentos y Organismos autónomos van a ejecutar en torno a los mismos. Los ejes son los siguientes: atención a las mujeres que sufren violencia de género, coordinación y cooperación institucional y, por último,  sensibilización, prevención e investigación.

Atención a las víctimas

Este eje tiene como objetivo que los servicios y recursos gestionados desde el Gobierno Vasco ofrezcan una atención multidisciplinar e integral a las mujeres víctimas de cualquier manifestación de la violencia de género, lo que exige ofrecer respuestas integrales de forma ágil y coordinada, evitando que las víctimas obtengan respuestas parciales.

Entre las acciones más significativas en este eje destacan:

  • La puesta en marcha y la implementación de la ventanilla única del Gobierno Vasco y de la herramienta informática para gestionar el expediente único de la víctima.
  • El compromiso respecto a las ayudas económicas y otras medidas de apoyo para que las víctimas superen las consecuencias de la agresión y consigan vivir una vida libre de violencia. Se contemplan iniciativas concretas para abordar la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual.
  • El análisis de la especial vulnerabilidad de algunos colectivos de víctimas (mujeres inmigrantes, con problemática añadida de salud mental, de drogadicción, etc.).
  • La mejora en materia de seguridad, de la atención y protección de las mujeres que sufren cualquier manifestación de la violencia de género, a través de la implementación y potenciación de los sistemas de gestión de calidad.
  • La tramitación de una iniciativa legislativa para combatir la violencia machista contra las mujeres.

Coordinación y cooperación institucional

El segundo eje incide en conseguir la colaboración y cooperación adecuadas entre todos los organismos e instituciones implicadas en la lucha contra la violencia de género. La coordinación se revela como la fórmula más eficaz para conseguir la optimización de los recursos. Además, se pretende fomentar la cooperación y coordinación de todas las personas profesionales implicadas en la lucha contra la violencia de género, en cualquiera de sus manifestaciones, para desarrollar la máxima eficiencia y eficacia en los mecanismos previstos.

Entre las acciones previstas en este eje destaca la importancia del II Acuerdo Interinstitucional para la mejora en la atención a mujeres víctimas de maltrato en el ámbito doméstico y agresiones sexuales y su Comisión de Seguimiento, así como el Protocolo de coordinación y atención a las víctimas de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y la creación del Observatorio Vasco de la Violencia Machista Contra las Mujeres.

Sensibilización, prevención e investigación

El tercer eje de actuación trata de lograr la mayor comprensión social hacia este grave problema.

Las medidas contempladas pretenden prevenir y evitar las actitudes sociales discriminatorias que favorecen y alientan la violencia contra las mujeres. Para combatir este problema social es fundamental conocer su verdadera magnitud y causas, motivo por el cual se hace imprescindible disponer de datos seguros y fiables sobre la violencia de género en nuestra Comunidad, de manera que los estudios que se lleven a cabo sean el primer paso para encontrar fórmulas eficaces que den cumplida respuesta a esta problemática.

En paralelo a esta necesidad de sensibilizar a la sociedad se prevé adoptar medidas de concienciación y sensibilización de colectivos y agentes sociales claves, como el ámbito educativo. La educación cumple un papel clave en la prevención de este problema y, por ello, deben desarrollarse acciones dirigidas a fomentar una enseñanza en la que primen los valores de tolerancia, respeto e igualdad, dado que el problema de la violencia contra las mujeres tiene solución a largo plazo a través de la educación en valores no-sexistas. En este eje destacan iniciativas como el compromiso en la transmisión y difusión de datos estadísticos para visualizar el problema, la realización de campañas y jornadas de sensibilización ciudadana o la puesta en marcha de una web orientada a la juventud.